Alex Nogués. Akiara, 2019
Sofía ha perdido muchas cosas al dejar la ciudad y marcharse a vivir a un pueblo escondido, cerca de la costa. Ha perdido a sus amigos, a sus primos y los rincones favoritos que frecuentaba. También ha ganado otras, como un par de amigos nuevos, una bici estupenda y la libertad de movimientos que da una zona tranquila. Pero las cosas no marchan bien en casa. No han resultado como esperaban y su padre trabaja más que nunca. «Papá se ha vuelto un gran No»
Sofía tiene once años y medio, le gusta el arte y la música y no le gustan las matemáticas. Le gusta bajar a la playa en invierno y no soporta que su padre le diga que algún día tendrá que «ganarse la vida». Con estos mimbres Alex Nogués crea una historia tierna y profunda en la que plantea al lector qué es útil y qué no lo es en una sociedad acelerada de la que nos sentimos piezas de un engranaje. ¿Con qué finalidad? El tiempo se pasa y se van dejando cosas por el camino…
La situación de Sofía puede ser la de tantas niñas y niños, la de tantas familias, que no estaría mal algo de reflexión para revisar la escala de valores de cada cual. Ella llega a la conclusión de que lo que le gusta es ser inútil y, claro, dicho así nadie la entiende. Para aclarar sus ideas y poder contarle a sus padres lo que siente decide ponerlo por escrito, como en un diario, y esa es la forma elegida por el autor para ponerse en contacto con los lectores. Una declaración de principios llena de humor y sentimientos que luego recoge la ilustración de Bea Enríquez.
La editorial Akiara lanza, con este título, una nueva colección de narrativa destinada a los lectores preadolescentes, con un formato cuidado y con la intención de provocar debate. Y en esta ocasión nos recuerda que también el arte, la naturaleza, la contemplación, la música son cosas que hay que cuidar porque es lo que nos hace humanos. MB
Recomendado a partir de 10 años