Katja Brandis y Claudia Carls. – Edelvives, 2020.
Carag es un cachorro de puma fascinado por la vida de los humanos. Esta definición se queda corta si no añadimos que se trata de un puma metamórfico, capacitado para transformarse en humano con relativa facilidad.
Eso son los Woodwalkers, caminantes del bosque. Seres que convivan su forma humana y su forma salvaje y que conviven con nosotros sin que notemos su fascinante poder.
Cuando Carag decide convertirse en Jay y abandonar a su familia puma, no sabe la cantidad de dificultades a las que tendrá que enfrentarse. Como tampoco sabrá que en el internado Clearwater pueden ayudarlo a dominar su vida como metamórfico y adaptarse a un mundo que ignora su existencia. De las matemáticas, la lengua y la historia pasará a estudiar lucha, supervivencia y metamorfosis. Y comenzará a conocerse a sí mismo y dominar sus instintos ante compañeros humanos que serían presas en su vida salvaje. Conejos, ardillas, bisontes, una manada de lobos que le hace la vida imposible… y una hermosa wapití hacia la que siente algo muy parecido al amor…
La transformación de Carag es el primer título de la entretenida serie fantástica Woodwalkers. Por su trama podemos intuir las aventuras y problemas a las que Carag/Jay tendrá que enfrentarse en futuras entregas. Una familia de acogida que no conoce su verdadera condición, un rico mentor metamórfico sin escrúpulos, un lobo que lo ha elegido como rival, y una hermosa wapití a cuya presencia no puede resistirse. Estos contratiempos se ven compensados por los nuevos amigos del Clearwater. Metamórficos fieles y divertidos que no dudarán a la hora de ayudarlo a salir de sus problemas.
Junto a los temas tratados, variados y atractivos para los y las lectoras a los que se dirige, llaman la atención los personajes de la serie presentados en esta primera entrega. A los humanos, representados por la familia del protagonista, construidos con pinceladas quizá en exceso estereotipadas, se unen los auténticos protagonistas que habitan el colegio y los alrededores boscosos del internado. Llama la atención en ellos sus distintas personalidades humanas, muy coherentes con los comportamientos propios de sus características animales en estado salvaje.
Ya estamos deseando leer la siguiente entrega, que, por su título, Amistades Peligrosas, no anuncia mucha tranquilidad. M.L.P.
A partir de 10 años