Cristina Durán, Miguel A. Giner Bou y Laura Ballester. – Astiberri, 2018
El 3 de Julio de 2006, en Valencia, J.G.R. monta en un vagón de metro. El destino va a jugar a su favor cuando se da cuenta de que se ha saltado su parada y baja del vagón para recorrer el camino de vuelta. De haber seguido adelante, podría haber sido uno de los 43 muertos o 47 heridos que dejó el mayor accidente de metro de la historia de España.
El 3 de Julio de 2006, tres días antes de la visita del Papa a Valencia, dos vagones de la Linea 1 del metro de la ciudad descarrilaron convirtiéndose en una trituradora para una gran parte de los viajeros que los ocupaban.
Al dolor provocado por la cantidad de muertos y heridos del siniestro, se sumó desde el día siguiente el abandono y la desprotección a la que se vieron sometidas las víctimas y sus familias, ignoradas y silenciadas por una administración con prisa por pasar página, que no quiso asumir los fallos técnicos que intervinieron en el accidente.
El día 3, Premio Ciudad de Palma de cómic 2016 y Premio Nacional de Cómic 2019, narra la lucha que la Asociación de Víctimas del Metro 3 de Julio (AVM3J) emprendió desde entonces en busca de respuestas para esclarecer los hechos, en contra de la versión oficial de que el accidente fue imprevisible e inevitable.
A pesar del olvido provocado por la falta de respuestas y el paso del tiempo, el coraje de la asociación y de algunos aliados de la prensa que no desistieron en sus investigaciones (entre ellas una de las autoras, Laura Ballester, que plasmó en el libro Luchando contra el olvido, el largo camino de las víctimas del metro de Valencia), hizo que el caso, cerrado en 2007 por la jueza encargada, se reabriera en 2014. El punto de inflexión fue la presión social ejercida por la ciudadanía valenciana tras la emisión del programa Salvados de Jordi Evole el 28 de abril de 2013.
Los autores han conseguido una mezcla de ficción (basada en datos y hechos reales) y relato periodístico articulado en torno a varias víctimas ficticias, compendio de características de varias de las víctimas reales. Visualmente se narra en una estructura de viñetas clásica, en las que predominan primeros y medios planos de figuras geométricas y de trazo grueso, en una amplia escala de grises rota por el rojo sangre. Potentes metáforas y simbolismos visuales hacen que la narración se llene de momentos emocionalmente duros. Destacan desde el principio los tentáculos que ocupan la cabeza de todos los personajes implicados en la red de mentiras extendida por la administración tras el accidente. Tentáculos que se alargan y extienden a todo aquello que tocan. Especialmente impactante, en este sentido, es la escena en la que Juan Cotino, Consejero de la Generalitat Valencia, visita en persona a las víctimas ofreciéndoles suculentas indemnizaciones y otras prebendas, realmente tentadoras, antes de pedirles que renuncien a cualquier tipo de acción legal contra la administración (Cap. 4, p. 87)
Se trata de una historia delicada, tratada con honestidad y respeto a las víctimas, llena de detalles y datos, técnicos y jurídicos, que prueban los fallos cometidos por la administración y justifican la lucha de la asociación por sacarlos a la luz. No queremos extendernos en detalles en esta reseña, entendiendo que la mejor forma de conocerlos es acercarse al magnífico relato de los autores, expreso, claro e impactante. El trabajo se completa con varios apéndices, entre ellos un testimonio de la Presidenta de la AVM3J, una amplia lista de agradecimientos, la biografía de los autores y los nombres de todas las víctimas mortales del accidente, a modo de homenaje y memoria. M.L.P.
A partir de 15 años