Ricardo Alcántara y Gusti. Kalandraka, 2019
Cara Pintada es un jóven guerrero de la tribu de los Tero-Tero. Podemos imaginarlo en las grandes praderas corriendo, pues así lo dice el libro (corre veloz como el viento sin despeinarse ni perder el aliento), acechando, rastreando huellas de animales o buscando peligrosos forajidos. Es valiente, astuto y no tiene rival. Hasta que una voz resuena por toda la casa preguntando por el plumero y la fregona, y Juanito, que así se llama en realidad nuestro protagonista, vuelve de las lejanas tierras y decide esconderse prudentemente debajo de la cama «pues todo guerrero sabe que, mientras dura la tormenta, es mejor esconderse hata que vuelva la calma».
Un verdadero acierto que la editorial haya reeditado esta historia. En ella se lleva al papel el alcance de la imaginación y su capacidad de crear mundos enteros y verdaderos sin salir de casa, algo que saben hacer muy bien los niños. Ricardo Alcántara, autor de larga trayectoria, conoce el mundo infantil y refleja como nadie el paso de la ficción a la realidad, logrando meter al lector en ese mundo paralelo al que se llega a través del juego, un mundo donde cualquier objeto se puede tranformar en mil cosas que hagan aparecer la aventura. Y no necesita mucho para eso, lo hace con las palabras justas, frases cortas, escritas en mayuscula y con rimas que aportan dinamismo y mucha sonoridad a un texto sencillo, solo en apariencia.
Un texto que encuentra perfecta pareja en las ilustraciones de Gusti, de trazo rápido, ágil, lleno de detalles, potenciando el dinamismo y ese humor que ambos autores utilizan en sus obras. Humor que recorre la narración y con el que cierran la historia, como sucede en otra obra similar del tandem Alcantará-Gusti, El pirata valiente. En definitiva, una propuesta redonda, editada en cartoné, que divertirá a los pequeños aventureros. MB
Recomendada a partir de dos años.