Olga de Dios. Silonia, 2016
Tuto, Catalina y Kasper quieren jugar con Leotolda. Cuando llegan a su casa y no la encuentran, deciden buscarla por todos los rincones, empezando por el armario, un armario muy especial que contiene ¡nada menos que un jardin lleno de dinosaurios! Al enterarse que Leotolda acaba de pasar por allí, empieza para los tres amigos un viaje inesperado, lleno de sorprendentes personajes como sirenas-hombres, ballenas, ovejas, y hasta astronautas, que les van dando noticias de cómo es y por donde anda su esquiva amiga.
Los personajes recorreran escenarios de un mundo fantástico donde trazo, gesto y color salen de la mano de Olga con naturalidad, en una ilustración que imita de manera intencionada el dibujo infantil, que busca representar las cosas de forma fácil, con trazos a mano alzada irregulares, garabatos, vistas frontales…dotando así de cercanía a unos cuentos que conectan con el lector infantil, que los siente como suyos.
Pero no queda la cosa en el increible colorido y los particulares personajes. La autora, muy comprometida con la transmisión de valores solidarios, busca con sus libros la divulgación de temas como la diversidad, la igualdad de género, el consumo responsable, el respeto por el medio ambiente, procurando generar más referentes para los niños a través de historias cercanas y divertidas. En el caso de Leotolda, es un canto a la creatividad como herramienta para afrontar los retos diarios, una propuesta lúdica que busca fomentar la “confianza en nuestra creatividad como motor de cambio social“, según palabras de la autora.
Olga utiliza en sus obras ilustraciones digitales, aunque busca darle ese aire artesanal. Todas las ilustraciones de esta obra las ha realizado con tres tintas, tres colores directos Pantone. Aunque nos encanta el resultado he de decir que es un placer verla trabajar en directo con sus rotuladores y, empezando por los expresivos ojos, poder ver como nacen los personajes de sus cuentos. ¡Hasta la próxima, Olga! MB
Recomendado a partir de 3 años