Trampa para un pintor. – María Isabel Molina. – Alfaguara, 2014
Alonso entra a trabajar como aprendiz en el taller de pintura de El Greco en Toledo. En los inicios del siglo XVII, los estudios de pintura se realizaban normalmente en casa del más prestigioso pintor de la ciudad, durante un periodo mínimo de cinco años en los que el aspirante pasaba de ser aprendiz a oficial, realizando diversas tareas en la casa y pequeños trabajos en las obras de su maestro. Domenico Theotocopuli, el griego, anciano ya a sus sesenta y cinco años, gozaba entonces de una merecida fama como pintor. A su casa asistían cada día los más notables señores con encargos de obras con las que decorar sus estancias a la vez que alimentar su vanidad con posesiones materiales con las que despertar la envidia de sus iguales. En uno de los encuentros organizados por el pintor para agasajar a sus clientes dándoles a probar el más reciente producto traído de las indias, el chocolate, aparece doña Simonetta, reciente esposa del marqués de Rioperdido, antigua conocida de juventud de El Greco, cuya presencia, por motivos desconocidos, no agrada al pintor. Un misterio se cierne en torno a la figura de la enigmática dama italiana que pronto encarga en el taller un retrato de su esposo. El marqués, acudirá cada día a posar ante el maestro acompañado de su nieta, Elisa. Alonso, atraído por la bella joven, será el encargado de descubrir la amenaza que planea sobre su maestro, sibilinamente orquestada por la ambiciosa italiana, que está utilizando a Elisa para conseguir sus fines. A la vez Alonso conocerá el amor. Un amor condenado al fracaso por la distinta condición social de los enamorados, entre los que será la joven Elisa quien de forma complaciente y resignada, renuncie a su deseo para rendirse a su destino, ingresar en un convento, como era uso en la época para muchas mujeres.
Trampa para un pintor es una novela de intriga, bien escrita, ágil y entretenida, con la que la autora, gracias a su trabajo de documentación y ambientación histórica, muestra de forma fiel, rigurosa y a la par amena, los usos y costumbres de la España retratada, en un ambiente tan concreto como el taller de un pintor de prestigio. A la vez que el lector se sienta atraído por la trama de misterio en torno a este personaje histórico, conocerá y aprenderá las claves del trabajo de cualquier pintor de la época y más concretamente de El Greco, su obra, su taller, su forma de organizar y distribuir el trabajo entre aprendices y oficiales, el día a día de la casa y su gestión, y un oscuro incidente de su vida en el que hubo de lidiar con la Inquisición acusado de herejía. De esta forma, veremos también cuales eran las artes de esta poderosa institución, su forma de actuar, la celebración de los juicios y sus intereses económicos y de poder. M.L.P.
A partir de 12 años
