Jack London, Enrique Flores. Anaya 2015. Reedición
En los bosques nevados del Yukón, en Canadá, un cachorro y su madre caen en las manos de un indio llamado Castor Gris. Esta cria de perro lobo recibrá el nombre de Colmillo Blanco y su destino parece ligado al trineo al que le atan y a las palizas que le dan para enseñarle a obedecer al hombre. Tampoco con los demás perros se lleva bien, asi es que su vida es bastante dura, convirtiendose en un fiero animal. Despues de pasar de unas manos a otras en ese ambiente hostil y quedar gravemante herido en una pelea ilegal de perros, es recogido por Weedon Scott, que por fin le proporcionará una vida que Colmillo Blanco nunca había conocido.
Este clásico de la novela de aventuras apareció la primera vez por entregas en una revista, siendo publicado en 1906. Ambientado en los vastos y helados bosques de Canadá a finales del siglo XIX, cuenta el camino hacia la domesticación de un perro lobo salvaje, idea que ha sido adaptada al cine varias veces. El autor escoge narrar la historia desde el punto de vista del perro, lo que hace que el lector se identifique con los sentimientos del animal y se conmueva con esta vida dura y en ocasiones violenta.
La azarosa vida del autor quizá sea lo que le llevó a aplicar en sus libros la idea de lucha por la supervivencia, asi como el concepto de la sociedad como una jungla, pero no cabe duda que su excelente narración te atrapa a la hora de describir la naturaleza en su estado más salvaje. Pocos diálogos y mucha acción, en ocasiones algo dura, transmiten bien el despiadado mundo de los animales y el de los humanos, pero también muestra otra cara, la del cariño, la paciencia y el respeto, sentimientos con los que se mantiene un equilibrio con la naturaleza. MB
Recomendado de 12 a 14 años
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